RAZONES
DR.
ARTURO JARAMILLO PALOMINO
@ArturJaramilloP
“Hay
señales de debilidad institucional en el país”: Lic. Enrique Peña Nieto, Presidente de México
Un
servidor hace esta reflexión. “Lo que sucede en nuestra patria, en los
terribles acontecimientos de inseguridad que la sociedad padece, configura un
estado en decadencia”.
No
es para menos, amigo o amiga que nos dispensa su atención. Hoy nuestro país está
sentado en la silla de los acusados y en la mira y atención de reproche y
castigo en Europa, en Estados Unidos, en América Latina. Asesinatos
por todos lados, por docenas, desaparecidos, perseguidos, torturas y
violaciones a los derechos humanos.
Ahora
resulta, que en lo que va del gobierno de Peña Nieto, el país está peor que
bajo el gobierno panista, y que tanto se satanizó. Estamos peor que antes.¿Qué
pasa? ¿Por qué? ¿Quiénes son los causantes? ¿Qué debemos hacer todos, no solo
el gobierno?
Los
estudiosos, como los sociólogos, expresan que los movimientos sociales, en
buena medida, son provocados desde el mismo poder o facciones de este, o como
un ejercicio de poder en su contra. A veces nos dicen que obedecen a grupos
ajenos, como a organizaciones criminales que buscan el poder. Ahora, hay que
aceptar que no quiere decir que los movimientos sociales no sean auténticos o
que sean ilegítimos, no, lo que pasa hoy, según la opinión valiosa, es que el
gobierno en sus tres niveles, legisladores, partidos políticos, entre otros,
continúan mintiendo, continúan con sus mentiras y queriendo casi lavar el
cerebro a los mexicanos, valiéndose de todos los medios a su alcance, radio,
televisión, prensa escrita.
Mienten y mienten mostrando en cada instante grados
de descomposición, donde se tapan unos a otros por simples intereses mezquinos
y no atender al país, al Estado o al municipio. Olvidan
que uno de los grandes retos que enfrentan todos los gobiernos es el de la
pérdida de confianza de los ciudadanos en las instituciones. Sin confianza, los
gobiernos se ven debilitados en su capacidad de acción para impulsar metas de
desarrollo que beneficien a la gente.
¡México
hierve! Vivimos momentos sangrientos, pereza del gobierno federal y queriendo
responsabilizar a los gobiernos estatales de la problemática de los delitos que
tienen competencia federal. Protestas violentas. Movimientos muy importantes de
jóvenes estudiantes, a los cuales se les trata de satanizar, inclusive de
responsabilizarlos de sus acciones que al politizarlos, los quieren manchar,
cuando ellos son los que han sufrido el castigo de un gobierno fallido.
Estos
movimientos que se perciben en el territorio nacional, significan zozobra e
intranquilidad. Incertidumbre por la inseguridad y la violencia, más aún cuando
no se percibe castigo alguno, culpables verdaderos y no inventados, lo que
pinta un federalismo rebasado que solo muestra ineficiencia, ineptitud,
corrupción y lo más peligroso, el vacío de autoridad. Vemos Gobernadores que
tienen copados a sus Congresos, la vulnerabilidad y corrupción de los alcaldes,
lo que nos conlleva a una indefensión total ante el poder.
Un presidencialismo
vacilante que se le desmorona el país, después de sus erráticas reformas
estructurales, que el mismo Banco Mundial ha expresado que en México continuará
la desigualdad social y económica, pero, lo peor, sin su riqueza energética.
Sin
ser alarmista, en la forma que se están presentando estos hechos de sangre,
donde no se encuentran, ni cuerpos de asesinados, donde no se encuentran los
autores intelectuales, inclusive, los causantes directos de estos ilícitos,
perseguidos por el ejército, la marina, policía federal, policía elitista como
si fueran robocops, no es más que una muestra de que se está ante el problema
de un verdadero terrorismo de guerrillas. Esta situación, amigo mío, es una forma
de ver cómo el segundo año de la administración de Peña Nieto, padece una
crisis muy grave.
Los
estudiosos de la problemática que nos enfrentamos gobierno-sociedad, es que no
se ha valorado o por compromisos, complicidades, o traicionar la historia y
democracia de nuestro México, es que los grupos criminales se han sofisticado,
no solo dan trabajo a campesinos, jóvenes sin futuro, valiéndose de la pobreza
extrema que envuelve al país, no tan solo últimos sexenios, sino en décadas y
el país y mexicanos estamos peor, en lo que usted quiera, dan trabajo a
profesionistas, ahora están en agrupaciones empresariales o bien en la política
pura, infiltrados por todos lados que es lo que los ha hecho poderosos e invencibles.
Mejores
estrategias, mejores armas, mejores sistemas de espionaje y una magnifica
organización. No se trata de crear agrupaciones de policías elitistas y
armadas, si se olvida que estos individuos vienen de un estrato socio-económico
muy bajo y por esa condición no están preparados psicológicamente para darles
armas y poder. No es correcto combatir la violencia con personajes violentos.
Existe
un rompimiento de valores cívicos, que debilitan el andamiaje social, no es
fácil el compromiso para enfrentar esta situación del país, la tarea es enorme.
Realizar políticas públicas que disimulen la incorporación a grupos malosos,
crear empleos bien renumerados, educación, salud, pero sobre todo no volver a
consagrar estas acciones a los ya conocidos políticos corruptos. Sancionarlos,
no tan solo separarlos del cargo, meterlos a la cárcel y que regresaran lo que
se robaron. Si no se cumplen estas consignas, si continúa la impunidad,
continuará la corrupción.
México
se desmorona, es peligroso, solo nos queda solidarizarnos, unir fuerzas, amar
al país, amar a la patria, defender nuestro patrimonio, nuestra familia, ser
fuertes, valientes y recordar solo que no estamos perdidos, si nos unimos pero
en forma sincera, quizá salgamos adelante con este México que está sangrando y
perdiendo la vida.
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